supervaga

male me criticó porque no actualizo el blog. y tiene razón pero no se por qué me cuesta actualizarlo. se ve que los 25 me pesan. estoy vaga ultimamente. vaga, vaguísima.
por ejemplo, tengo que llamar al dentista para arreglar un turno para que me termine un perno-corona-robo-a-mano-armada, y no doy con esa idea... mirá que lo pienso y lo pienso, pero me cuesta agarrar tanto el teléfono... no se por qué. es la vagancia. debe ser eso. más me da la idea de vagancia que cuando finalmente llamo y no me contestan, entonces me pongo muy contenta porque no tengo turno para tener que ir al dentista. Ni hablar del detalle que, para ustedes quizas no sea relevante pero para mí si, que el consultorio no está ni tan lejos ni tan cerca de mi casa, lo que implica que ni da ir en bondi y si da ir caminando aunque sean mas de 10 cuadras. no me gusta. me da vagancia. mas vagancia aún.
otro ejemplo de mi nueva condición es que ayer no fui a clown. eso es de re vaga. sobretodo porque es un lugar donde la paso mucho muy bien... pero de tan bien que la paso, ayer se vio que decidí ausentarme del goce. es que no jodan, ayer ni daba. NI DABA. un día horrible con posiblidad de tormenta heavy en cualquier momento (tormenta que, a decir verdad, nunca se desató plenamente) no era un día indicado para andar pululando por la calle hasta altas horas de la noche. de vaga me quedé en casa. y de gorda cocinamos pastel de papa y budín de pan.
gorda y vaga. vaga y gorda.
ida y vuelta.
y si lo pienso otra vez mne da sueño.

debe ser de vaga.